Ten en cuenta que el 20% del consumo energético vital va para el cerebro. Con las pilas descargadas no podemos pensar bien: entonces todo se ve terrible, nos irrita cualquier cosa y amenaza la depresión.
Si sientes esa falta de fuerzas para lidiar con tu vida, sin duda es porque:
a) No cargas suficiente energía.
b) Gastas más de lo que te entra.
Puedes mejorar tu CARGA de energía con: comida saludable (no procesada), aire puro, naturaleza, buenas lecturas y relaciones. Cuida tu espiritualidad.
En cuanto al GASTO, es vital cortar las fugas. Derrochamos energía con discusiones, pensamientos obsesivos, vicios, relación con personas tóxicas... encuentra qué te está robando la vitalidad y corta con ello urgentemente. Te va en ello la vida.
Deja de quejarte o reprochar a otros, cada insulto al mundo o a las personas te desgasta. Emplea mejor esas fuerzas en cambiar lo que esté en tu mano en lugar de tirarlas al viento.
Jamás vuelvas a dirigir tu ira hacia los que quieres o con quienes pretendes construir. Si lo hiciste, discúlpate. Es hora de crear una isla con ese magma volcánico.
Toda esa fuerza acumulada que dejes de derrochar va a explotar a tu favor. ¡Y el cambio se nota rápido! Por favor, muéstranos de verdad hasta dónde llega tu furia.
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